Se considera que el 11 de octubre de 1492 fue el último día de libertad y soberanía de los pueblos indígenas de América. La llegada de Cristóbal Colón a las Antillas el día siguiente originó un proceso de colonización, genocidio y saqueo que, bajo diferentes formas, continúa al día de hoy.

La conquista europea implicó la muerte de más de 80 millones de personas pertenecientes a los pueblos americanos, el mayor genocidio de la historia. La reducción a la servidumbre, la introducción de enfermedades desconocidas y la imposición de culturas fueron solamente algunas de las formas que tuvo la colonización. Como resultado de este atroz proceso, desaparecieron numerosas culturas y saberes únicos, y se produjo un saqueo de recursos cuyas consecuencias perduran hasta la actualidad.

El 11 de octubre es un día de resistencia para los pueblos originarios, que siguen luchando por el derecho a sus territorios, un medioambiente sano, igualdad de oportunidades, una educación bilingüe e intercultural, acceso a la salud, y el fin de las violencias. Los pueblos indígenas existen y resisten. ¡Derechos para los pueblos ya!